Alberto Cecereu
Alberto Cecereu, (Valparaíso 1986). Publicó “Noticias sobre la Inmanencia” (Ed. Altazor, 2005) y su obra ha aparecido en medios y revistas de Estados Unidos, Argentina, Venezuela y Chile, aparte de haber sido traducida al inglés.
Estudia Historia y Ciencias Sociales en la Universidad de Valparaíso, y se aventura con peligro de censura en considerarse un neomarxista habermasiano declarado.
Del 2004 al 2006, fue asesor editorial y corresponsal de Los Poetas del Cinco, de Venezuela. Revista literaria que ahora permanece en Santiago de Chile. Asimismo ha integrado las sesiones del Seminario de Reflexión Poética de La Sebastiana, Fundación Neruda.
Le ha sido otorgado el 2006, el Premio Enrique Lihn, del Concurso Nacional de Arte y Poesía Joven, y además el Premio Carlos León Alvarado, como primer galardón poesía. Además el Consejo del Libro, lo reconoció en el 2006 con la Beca a la Creación literaria para el desarrollo de su próxima obra, de la cual esta selección de poemas corresponde a su nueva entrega.
Afinidades y menciones:
Enrique Winter
Ennio Moltedo
Hugo Mujica
David Rosemann-Taub
Sergio Muñoz Arraigada
Jorge Polanco
Sergio Madrid
Guillermo Rivera
Ximena Rivera
Felipe Moncada
Carlos Henrickson
Luis Correa-Díaz
Humberto Díaz-Casanueva
Poesía:
Antropología
los antropólogos comenzaron a vestirse de harapos
y comenzaron brutalmente
a robarse las reliquias de mis equipajes
encontraron un sinnúmero de artículos reservados
una radio soviética a cuatro pilas para escuchar el olvido
un diario norteamericano del imperio extinto
un manual de mitología griega para reparar el sueño
uno que otro utensilio asesino que sirva para conspirar contra el papa
y de paso se dieron cuenta
de métodos anticonceptivos
para seguir amando
comenzaron estos sujetos
brutalmente
a aplicar un cuestionario de mil preguntas
me cortaron la barba milenaria
y como si fuese normal
me desnudaron delante de un caserío desconocido
en el cual comían las lentejas con miel de vaca
para esto les dije
me hubiese quedado en mi casa
cuidando de la mujer rubia de metro ochenta
un poco exuberante media dinamarquesa
esa que hace rico el chocolote caliente
así como una espuma
para esto les dije
hubiese venido desnudo a los valles calurosos
como una gaviota
y en vez de viajar de noche
haber mirado desde el cielo como suceden las guerras
en lugares comunes
los antropólogos comenzaron a vestirse de harapos
y comenzaron brutalmente
a denominarme con frases no muy felices
e incluso aventuraron a particularizarme
entre tantos que éramos
así como muchos
en el grupo reunido de los perplejos
concluyeron a nombrarme condestable de los viajes
con título de gracia
con aeroplanos
2066
año 2066
por si se te ocurre algo me dijeron
el par de duendes que morían en los bosques cristalizados
con la contaminación triunfante
en una de esas pensé
me compro el país entero con la venta de los pensamientos
tricolores que recojo en mis vueltas por la noche
en una de esas pensé
termino el martirio de los mitos
ingreso a las farándulas mundiales y dejo mi hábito sagrado
para comenzar a divisar los horizontes de las cenicientas amotinadas
y quizás con suerte firmo un pacto de no agresión
con celebraciones diplomáticamente groseras
año 2066 me gritan
y me devuelvo para no ver más
Ascensión
chang tzú nunca soñó ser mariposa
sino que fueron dibujos en el agua
algunos de un vuelo rápido sobre el ojo la pupila
otro acaso una exploración de un trueno que nadie vio
una pregunta eterna: una imagen: la luz en éxtasis
un boceto de los ríos en el cielo: la confusión
y ahí estaba chang tzú
con sus alas de madera envueltas por la imaginación
del otoño: la opera de las hojas
chang tzú nunca soñó ser mariposa
sino que su espíritu de nuevo como arrebol
palideció entre los cimbreantes árboles de una caleta
y la armonía cantaba el orgasmo del paisaje
acaso la pintura imaginada en una noche
una pregunta eterna: una imagen: la sombra que atraviesa
la tempestad musical: la muerte de todos los pájaros
todo eso cuando chang tzú
se recostaba esperando la aclamación de una tarde
el ocaso del maestro celeste
Desilusiones
acá
he visto casi todo
menos los bosques de bambú
a pesar de estar en filas los cañaverales
que llaman a contemplar esa búsqueda que esperaba
no vi
las flores de loto
en las aguas tranquilas de estanques perezosos:
en el silencio aparecen sus siluetas pero no suceden
acá
he visto casi todo
a pesar de ser nuevo en
estas tierras de colinas profundas
y de atravesar el desierto con un candelabro de siete llamas
aquí
no habrá nada si no descubro
el aliento de las operas chinas
que comienzan en el término de toda primavera
en el aparecer de las cuerdas cantoras
por eso reclamo en el alto de los árboles
el mensaje de la noche
y miro las batallas de los maestros luchadores
en el remanso de tabernas no permitidas
por eso acá
se me ofrece el matrimonio de los ermitaños
www.albertocecereu.blogspot.com
albertocecereu@hotmail.com
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