Juan Carlos del Río



Santiago, 1971.
Es Técnico jurídico, Licenciado de Administración Pública por la Universidad de Valparaíso. Vivió en Río Grande, Argentina y en Santiago, luego, el año 1998 se traslada definitivamente a San Antonio, V Región. 
Ha publicado Partición (Ed. Pieza oscura, 2006) y aparecido en Escritura Pública, Obras reunidas (Editorial Economías de Guerra, 2008), del Taller de escrituras Buceo Táctico, del cuál forma parte desde el 2005. Prontamente dará a conocer la plaquette de poesía CAURITO, por Editorial Economías de Guerra de San Antonio.  
Además es miembro activo de la Sociedad de Escritores de Chile, Filial San Antonio. 



Sus afinidades electivas son:

Enrique Lihn
José Angel Cuevas
Roberto Bescós
Yanko González
Florencia Smiths


Poesía:


Conjunto habitacional Las Rosas
Entrega inmediata
viva en el sector con mayor plusvalía de la ciudad
cercanía de servicio públicos y comerciales
haga posible el sueño de la casa propia



Y llegamos en un camión ¾
con el salvoconducto de felicidad en la cara
riéndonos solitos
nadie nos esperaba
una sábana flameaba en una plaza
como una bandera
y estaban los blocks
como legos perfectamente distribuidos
pintados en un solo tono
como nichos de 4 pisos
el sueño de la casa propia
era una llave
una escalera de cruz
un letrero de la Obra
un encuadre fotográfico perfecto
una evidencia de lo que fue posible
una campanada al oído
un canto gregoriano rapeado
la villa es una catedral de par en par


II

Y llegamos
cuando la cantería del ladrillo princesa
estaba fresca
en la segunda mano de pintura
cuando el cerco de protección
no se había descascarado
y el brillo no estaba venido a menos
a casi nada
a esa opacidad que oscurece la plaza
y éramos estrellitas brillando
la luz celestial
en este cielo raso que es:
una villa,
      una población,
                 un conjunto habitacional
la casa del ser para los analistas
el desarrollo territorial para los urbanistas
un páramo social
una costra en la ciudad
una x
para la seguridad pública


III

Y llegamos
sin patear la perra
con el espejismo de una casa
como un oasis
a éstos caniles
porque acá, dicen
las bestias se separan
de vez en cuando
el bozal se suelta
y salen todos mordidos
con sus propios dientes
y rasguñados
con sus propias uñas 


IV

Aquí no habrá cumpleaños lumpen
Acá nos sacaremos los balazos
para siempre
no serán tristes las noches
ni habrá cotillón de papel volantín
que se rasgue con el viento
como membrana de sub-producto carneo
acá la memoria será una metáfora
acá el circulo cerrado se rompe
acá la carne en el plato se enfría


V

Aquí no seremos los payasos
de una toma erradicada
no será todo para la risa
aquí no detendremos el agua
aquí seremos otros
acá nuestra piel cambiará
como en las serpientes
no seremos morenitos
no seremos negritos
no seremos mapuchitos
acá nos subirá el pelo
hasta el dintel de la puerta


VI

Aquí justo aquí no será necesario el sahumerio
Aquí las brujas se pierden
Aquí no encontrarán huellas en los cristales
Aquí solamente medallitas y santitos
Aquí los retratos no serán hablados 


De: VILLA, texto inédito.